...Motivador.....

...comparto........

--Reflexion de vida...........

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No estas solo........¡

...Reflexión de vida.......

En el año 2000 , encerrado en la biblioteca de mi mejor amiga en la ciudad de Armenia , encontre entres sus libros un folleto sucio , pequeño, en fotocopia media carta.......este seria uno de los documentos mas inspiradores de toda mi vida, del cual agradezco a Dios haberlo puesto en mi camino , este folletome ha inspirado y guiado al lugar donde estoy...

Lo comparto, espero sea de mucha utilidad.

FANEGAS DE DIAMANTES

Amigo el porvenir no es un libro cerrado, gran parte de lo que va a suceder esta determinado por los acontecimientos.

Pocos son los que proyectan su pensamiento mas allá del presente.

Encontrara en este maravilloso folleto, al leerlo, releerlo y ponerlo en practica, la oportunidad para enriquecer su futuro.

Yo lo recibí de manos de un gran amigo, hoy se lo entrego a Usted con el mayor deseo de cambio.

JONAS CARDONA QUINTERO.

¿Sabe usted cómo fue creado el Universo de Temple, en Filadelfia, una de las mas famosas de los Estados Unidos? Su función  se debe a un hombre cuya vida ha sido ejemplo e inspiración para millones de norteamericanos: El doctor Russell Hernan Onwell, abogado y predicador.

En 1881 empezó el doctor Onwell su titánica labor para poder llevarla a cabo, tenia que juntar entre seis y ocho millones de dólares y para lograrlo, hubo de dictar entre ocho y diez mil conferencias en el territorio de los Estados Unidos y Europa. En todas sus conferencias repitió una historia FENEGAS DE DIAMANTES.

Desde que se oyó por vez primera, hasta nuestros días, esta historia verídica ha modelado la vida de miles y miles de hombres y mujeres. Aun hoy día, aunque han pasado muchos años, este relato sigue siendo tan vibrante e inspirativo como lo fue en su tiempo.

Fanegas de Diamantes cuenta la historia de Ali Hafet, un rico granjero persa que vivía junto al Indo. Ali Hafet era ambicioso: deseaba poder, gloria, fortuna. Aunque ya era rico, sus riquezas no eran suficientes para calmar sus ambiciones.

Supo una ves que los diamantes eran las joyas mas preciada y se hizo el raciocinio de que la posesión de las minas que los producen, le daría, además  de una fortuna inconmensurable el poder y la gloria. Cuando supo esto, casi no pudo esperar para vender sus propiedades y salir a recorrer el mundo en busca de la minas de diamantes. Recorrió montañas y llanuras, exploro ríos y océanos en su desesperada búsqueda de las minas que producían las preciosas gemas que tan buen precio tenia en los mercados del mundo. Pero...

Nunca tuvo éxito.

Un día, sin dinero ya, desesperado y medio enloquecido por su fracaso, se lanzo a las aguas del Mediterráneo  y murió ahogado.

Entre tanto, el hombre que compro la granja a orillas del Indo, Hallo un día una rara piedra que reflejaba los rayos del sol, devolviéndolos con igual brillantez. Al hacerlo examinar, se hallo que era un diamante de incalculable valor. Y la finca estaba literalmente cubierta de piedras semejantes, en distintos tamaños, que se encontraban con solo remover una ligera capa de tierra.

El sucesor de Allí Hafet hallo la riqueza y el poder, en el mismo suelo que aquel había abandonado.

Esta es una historia real. Es la historia de cómo fueron descubiertas las famosas minas de Golconda, cuyas gemas enriquecieron las coronas imperiales de Inglaterra y de Rusia.

Ali Hafet nunca se detuvo a averiguar como era un diamante en bruto ni como se podía distinguir. Obrando igual que miles y miles que ignoran lo propio por buscar lo ajeno, malvendió sus granjas y se fue a buscar, en otros sitios, la riqueza que siempre había tenido bajo sus propios pies.

Esta es la historia. Lo que impresiono de ella al doctor Conwell y a sus audiencias en todo el mundo, fue su similitud con nuestras propias vidas: Todos vivimos en medio de Fanegas de Diamantes, pero carecemos de la adecuada actitud mental y la preparación para saber como son nuestros diamantes y como estamos ahora.

Pasamos nuestras vidas buscándolos en empleos y negocios de distinta índole y en sitios diversos, sin darnos cuenta de que los tenemos bajo nuestros propios pies.

Por desgracia esa historia no es única.

En Pensilvania vivía un granjero que, aunque  prospero, siempre deseaba dedicarse a una cosa distinta.

Pero él era muy precavido y cuidadoso; no iba a vender su granja sin tener antes algo seguro. Se fue al Canadá, donde un hermano se dedicaba a la industria del petróleo; al llegar, le solicito un empleo en su empresa, a lo cual le contesto su hermano “ Aprende todo lo que mas puedas sobre el petróleo y te daré empleo”.

El granjero volvió a Pensilvania y se dedico a aprender todo lo sabido hasta entonces sobre el oro negro. Sintiéndose ya capacitado, vendió su granja y se fue a trabajar con su hermano.

Ahora......ya lo imagina usted ; el granjero que compro la finca vio, solo una semana después  que los ganados que había traído no podían comer el pasto ni tomar agua de la orilla del río, porque todo lo cubría una capa de aceite, ¡Oro negro! ¡Petróleo!.

Allí nació la ciudad que es testigo de la veracidad de esta historia: Titusville, Pensilvania, una de las que originaron la portentosa industria  petrolera de los Estados Unidos.

La historias esta llena de casos estos, ¡En todo el mundo!

En un país suramericano, nació un hombre que se creía muy listo y que creía merecer todo del mundo. Aprendió en forma mas o menos rápida la contabilidad se empleo en una pequeña fabrica de la ciudad. Nunca  dio nada de si. Siempre es limito a cumplir y en forma no muy estricta los deberes de su cargo.

Pero considerándose explotado porque algunos colegas ganaban mas en industrias mayores, a los pocos meses renuncio y se fue a buscar otro trabajo. Quien lo reemplazo, un joven europeo, se dedico primero que todo a estudiar la industria y sus posibilidades; colaboro con el propietario en todo cuanto podía ser útil, fuera o no de su cargo; estudio con ahínco todas las fases directivas, los mercados y ventas. Así se dio cuenta del inmenso futuro que tenia la empresa.

El resto ya lo imagina usted; Hoy es socio de esa poderosa empresa industrial, cuyos productos se venden en todo el continente.

¿Y.. .que es de nuestro amigo? ¡Bueno! Ha tenido muchos empleos que siempre abandona por buscar algo mejor. Pero ya ha agregado una muletilla a su vocabulario: “Los extranjeros le quitan todas la oportunidades a los del país”.

Historia como estas se suceden a diario. Los hombres y mujeres viven en busca del pasto del vecino, creyéndolo mas verde, pero no se detienen nunca a pensar que el suyo puede se tanto o mas verde que aquel que envidian.

La verdad es que mientras deseamos el puesto de otros, hay cientos que darían años de su vida por tener el nuestro. Nada me parece más digno de lastima que esos miles de Ali Hafet, que pasan su vida buscando cofres de tesoros en el arco iris de empleos o negocios y llegan a la vejez, amargados y escépticos, con sus tristes experiencias, sin haber logrado mas que decepciones.

Pasan su feliz existencia buscando el empleo ideal en que puedan obtenerlo todo, sin dar nada a cambio; deseando siempre el puesto de otros, porque lo creen mejor, pero sin dar una mirada a sus fanegas de diamantes, a las riquezas que tienen bajo sus pies y que solo esperan su atención y cuidado.

¿Se ha detenido a pensar que, no importa cual elevada sea la meta que se haya fijado, el camino hacia ella puede estar en el ejemplo que tiene actualmente?

Napoleon King lo dijo: “Cuanto la mente humana puede concebir, puede lograr”. Por tanto, en usted y solo dentro de usted están las poderosas fuerzas que le puede dar la fama, el poder y la fortuna.  Ahí estén ¡Solo necesita decidirse a obtenerlos!

Éxito no es azar. Es el resultado de una cuidadosa planeación de nuestras vidas y la dedicación a nuestros objetivos. Por desgracia para la humanidad, los hombres, en su gran mayoría, ven el éxito como algo nebuloso que solo obtienen quienes nacieron con buena estrella.  Solo muy pocos vienen a darse cuenta de que el éxito esta al alcance de quien se lo proponga.

Hasta que una parálisis transitoria me obligo a un granjero de Winsconsin a usar los poderes de su mente, no se dio cuenta de que sus ganados producían un tipo de carne de excepcional calidad. Así nació una de las más grandes industrias  empacadoras de carne de los Estados Unidos. Su granja contenía  Fanegas de Diamantes que el no hallo hasta que no las vio en su mente.

Un periodista a quien en un cuarto de hotel se le dificulto lavar un vaso en que había servido un poco de leche, concibió los vasos de papel  desechables. Esa idea le permitió amasar fortuna.

Un vendedor de seguros tuvo la idea de volver donde sus antiguos clientes y servirles en forma diferente. Con esta idea, vendió mas de US$ 700.000 extras en seguros ese año y llego a pertenecer al club del millón. Nunca tuvo que preocuparse mas por prospectos. Al  visitar antiguos, en vez de nuevos clientes, hallo que su archivo contenía Fanegas de Diamantes.

Una de las 300 mecanógrafas de  una compañía productora de artículos eléctricos, hallo que solo con dedicar un fin de semana a diseñar el tipo de circulares usado por la empresa, su sueldo se doblo: y en poco tiempo llego a ocupar la jefatura de su departamento.

Un hombre halló sus Fanegas de Diamantes en una bomba de gasolina: Siendo  allí empleado, cada día se levantaba, diciéndose a si mismo: “Que podré hacer hoy para servir a mi empresa y a mi clientela”. Aun hoy, retirado y millonario, se preocupa todos los días por aumentar los servicios a sus clientes.

Por eso sus negocios cubren, hoy, todo el oeste de los Estados Unidos.

Un día llego a su bomba un propietario de camión. Como la mayoría de los hombres, este solo pensó: “Como me gustaría tener este negocio”. “Con seguridad es mejor que el mío”.

Como sucede con tanta frecuencia, este hombre no se detuvo nunca a pensar que no hay ni buenos ni malos negocios; ni buenos ni malos empleos: Solo hay hombres y mujeres cuya actitud mental no les permite preparasen para ver las oportunidades que hay en todo empleo o negocio.

En cambio, otro día llegó a su bomba un hombre solicitando un galón de gasolina. Les fue muy difícil medirla, por carecer de instrumentos industriales de medición.  Viendo que el mismo problema se presentaba en todas partes, este hombre ideó los envases graduados, de tanto uso hoy en todo el mundo.  Aquel hombre halló sus fanegas de diamantes en una tarea tan simple como buscar un galón de gasolina.

La mayoría de los empleados viven tan ocupados, hablando de sus resentimientos, que no tienen tiempo para preocuparse por su futuro.  Se llenan de limitaciones y no se dan cuenta de que el futuro no está en el empleo de por sí, ni en la bondad de la compañía, ni en la situación política o financiera del mundo sino dentro de sí mismos.  Muy pocos se dan cuenta de que donde están ahora, en el empleo o negocio que desempeñan están las bases para una límite superación económica espiritual.

Ahora...  el mundo es impersonal. No le interesa si hay cambios por tanto, cada uno debe crearse su propia filosofía de la vida y dedicarse a prosperar en un  clima de libertad.  Las gentes que progresan en sus trabajos, que obtienen ascensos, que llegan a hacerse ricos, son aquellas cuya actividad mental y preparación les permite ver en cada labor que desarrollan, por pequeña o sin importancia que sea, una oportunidad para su progreso.

Así están listas para la oportunidad que toca todos los días a la puerta de los hombres y mujeres del mundo.

Un autor escribió:  “ Los hombres de hoy se quejan de falta de oportunidades”.  Esto es ridículo:  ningún hombre hallará oportunidades sino está preparado para verlas.  Por tanto, la llave del progreso personal está en la actitud mental:  Es haciéndonos tan competentes en el empleo que ocupamos en la industria, como forzaremos la oportunidad a tocar nuestra puerta.             

Permítame decirle que toda persona tiene derecho a recibir su pago de dos formas:  Material, en dinero y espiritual, en la satisfacción de los deberes cumplidos a conciencia; en el reconocimiento y admiración que todos profesamos a quien se distingue en algo.  No dejo de reconocer que hay empleados y obreros cuyas retribuciones no corresponden a sus esfuerzos.

Desgraciadamente es cierto.  Pero la balanza de la vida es justa y, tarde o temprano, los platillos se equilibran.

Entonces el buen empleado recibirá su recompensa: Asensos, mejores sueldos, reconocimiento a su labor y, sobre todo, la paz y la tranquilidad espiritual. Pero, también, el mal empleado vera que los platillos le darán su justo castigo: Una vida gris y mediocre, producto de su mal desempeño. Esta es la ley, gústenos o no.

Lo que usted desea será suyo. De usted es la elección. La vida  le retornara. Exactamente, lo que usted de. Sirva antes y se le pagara después. Sueñe, cree, trabaje, construya..... Haga esto y vera que no habrá limite alguno para su prosperidad y bienestar. Esa es la ley.

El Divino Carpintero nos dio esta ley en sus palabras sencillas: “Preguntada y se os responderá; buscad y encontrareis; golpeada y se os abrirá”. La prosperidad de todo hombre o mujer,  esta basada en una ley de mutuo beneficio. Cualquiera que añada algo a la prosperidad de las demás,  prosperara a la vez:  Tal vez su prosperidad no venga de quien se esta sirviendo hoy: Pero, sea de donde sea, le vendrá. Esta es la ley. Pero recuerde: Su recompensa estará en la medida exacta de la calidad y cantidad de los servicios que usted preste.

Quien trata de prosperar empequeñeciendo a otros, solo hallara que se ha empequeñecido a el. Las leyes de los hombres pueden evitarse. Los de la vida, nunca.

La imaginación creativa viene a darnos cuenta de que los diamantes no se ven como diamantes en su estado natural. Lo mismo, la mina de rocas ferrosas no tienen parecido alguno con el acero terminado. Así, también las oportunidades están escondidas en todo los aspectos del trabajo que actualmente desarrollamos: pero necesitan nuestra buena actitud y preparación para mostrarse.

Hay personas que aceptan un empleo y permanecen en el solo unas pocas semanas, unos meses, máximo un año, pero luego lo abandonan por buscar diferencia tontas en sueldo oposición. Empieza de nuevo en una actitud  diferente.  En esta forma están perdiendo beneficios,  conocimientos y experiencias adquiridos en el empleo que abandonan.

¿por qué actúan así las gentes? La respuesta es simple. Consideran  todo empleo como una obligación para subvenir a sus necesidades; no como una oportunidad para progresar.

Para comenzar la búsqueda de nuestro Fanegas de Diamantes, comencemos a desarrollar la facultad de la objetividad inteligente, esto es, el análisis  real de lo que se la vida, el trabajo; de lo que es el éxito y como podemos llegar a el.

El triunfo esta basado en una ley natural: Honestidad. No la llamada honestidad que consiste en no apropiarse de lo ajeno. No. La honestidad intima, honestidad para con nosotros mismos, para con nuestros empleadores, para con la empresa, con nuestra familia, en una palabra... ¡para con nuestro éxito!.

¡Honestidad.....Triunfo!  ¡Deshonestidad... Fracaso!

La objetividad inteligente nos enseña que nuestra tarea no esta en buscar pastos mas verdes, sino en hacer verdes los pastos que tenemos; ni en buscar diamantes hipotéticos en otras partes, sino en saber ver los que hay en nuestro empleo.

Los empleadores de todo mundo pueden deviniese en dos categorías: Triunfadores, Honestos; fracasados; deshonestos.

Primero que todo, vamos a estudiar los triunfadores.

Veamos las estadísticas:

Supongamos un grupo de  jóvenes de 25 años de edad.

Giremos el reloj... 40 años. ¿Sabe usted lo que será de ellos cuando hayan cumplido los 65? Uno será rico; cuatro serán económicamente independientes; cinco deberán seguir trabajando hasta la muerte para poder subsistir; treinta y seis han muerto o están en sitios donde no cuentan para la sociedad; cincuenta y cuatro dependen de sus familiares o de las instituciones de caridad para su subsistencia.

Ahora bien, ¿por qué hay tan pocos que obtienen tanto, y tantos que obtienen tan poco? Los hombres y mujeres que triunfan tienen la actitud segura de que pueden lograr cuanto se han propuesto; de que  no hay nada en  el mundo que le impida capacitarse, tener éxito. Tienen una aptitud optimista hacia lo que ellos mismos . Como resultado..... hacia la vida  y lo que desean obtener. ¡Y obtienen cuanto desean!

Son personas a las que titula de triunfadoras, destacadas, brillantes, afortunadas y muchos otros calificativos. En la gran mayoría de los casos no son ni mas capaces ni mas brillantes que las personas que les rodean; pero desarrollan ampliamente la adecuada actitud mental y obtienen su triunfo casi sin esfuerzo ,con sorprendente facilidad, como si no se lo propusieran.

La gente que triunfa puede tener toda clase de actitudes, experiencias y profesiones; pues  tener diferentes grados de inteligencia y culturas diferentes; pero todos tienen un denominador común: Esperan de la vida lo bueno y no lo malo;  dan siempre un poco de lo que  esperan recibir; tienen honestidad intima.

Los hombres y mujeres que triunfan. Que llegan a dirigir las empresas, vienen  de todas las actitudes: De las porterías, de las  ascensores, de las plantas de producción, de los salones de ventas, de las posiciones intermedias, de todos los niveles;  pero se distinguen en un hecho: Dan de si mas de lo que esperan recibir. Saben que nadie recibe mas de lo que esta dispuesto a dar y que nadie puede esperar que se  le de sin haber demostrado que lo merece.

Tenemos que encarar honestamente el  hecho de que todos somos arquitectos de nuestro destino; y que ese destino  estará  determinado por nuestras actitudes. Es nuestra actitud hacia la vida lo que determina la actitud de la vida hacia nosotros. Es nuestra actitud hacia la empresa la que determina la actitud de la empresa hacia nosotros.

Ahora vamos a desenmascarar un fantasma que tantos daños hace: El de la lucha entre el capital y el trabajo; el de que el propietario del negocio es, mas o menos, un enemigo del empleado y viceversa.

Seamos objetivamente inteligentes: ¿Cuál es el objetivo de la empresa? Obtener resultados económicos, si es una organización privada; mantener la administración eficiente sus fines benéficos, si es una organización de caridad.

Bien.  Entonces, la empresa necesita y busca ansiosamente el hombre o la mujer poco comunes que quieran compartir su crecimiento; y recompensara largamente a la persona eficiente que cifre su porvenir en el éxito de la empresa. Esto es apenas lógico.

¿Qué es el empresario?  El encargado de lograr los resultados económicos que persigue la empresa. Entonces, es apenas natural que el empresario favorezca y este dispuesto a llevar junto a el,  al empleado cuya actitud y preparación le ayude a cumplir su cometido.

Se oye muchas veces la queja de que el empresario favorece con los altos cargos  a familiares suyos. Pero sus empleados son ineptos, ¿no es apenas natural que favorezca mejor un familiar? Pruebe el empleado a demostrar efectivamente sus capacidades y  vera que no le sucederá una situación como esta.

¿Qué es una empresa? La conjunción de dos factores complementarios que se necesitan: Recursos, es decir capital y materias primas; y capital humano: Hombres y mujeres. Sin el capital ni los materias primas no habrá trabajo para el empleado; y sin el empleados, los recursos no pasaran de ser eso: Recursos; y el capital perderá su fuerza permaneciendo inactivo. No hay uno mas importante que otro. Se complementan. Siendo esto así,?no será por lo menos ilógico pensar que la empresa y el empresario desean mantener al empleado en los mas bajos niveles?.

Mejor pensémoslo así: Los recursos son la estática de la empresa; los empleados, la dinámica. Por lo tanto cuanto mas contribuya el empleado a la multiplicación de los recursos, mayor será la parte que le corresponda, es decir mayores serán sus ingresos.

Son muchos los que esgrimen la bandera de la lucha del  capital y el trabajo como una divisa para retaliaciones. Son esas personas las que externamente están colocadas en los mas bajos niveles, ya que sus inútiles resentimientos les impiden ver una verdad: No puede existir lucha entre dos partes unidas para un mismo fin. El empresario inteligente sabe que solo rodeado de buenos empleados podrá cumplir su obligación de producir buenos resultados económicos.

Pero sabe también que quien no contribuya a ellos, debe desaparecer. Es cuestión de objetividad inteligente, por parte  del empleado. Saber ver en que  categoría debe colocarse.

El  Divino pastor de Galilea nos dio una máxima, materializada después un una ley física. La máxima: lo que tu siembres,  eso cosecharas. La ley. Por cada acción hay una reacción.

¿Cómo se aplica esta ley y esta máxima en nuestra vida diaria? Ya lo dijimos antes: Nadie puede esperar recibir mas de lo que esta dispuesto a dar a cambio.

Ahora bien! ¿sabia usted que cualquier persona que estudie o practique algo durante seis horas  diarias, cinco días a  la semana, 50 semanas al año,  se convertirá en un experto nacional en solo cuatro años? Recuérdelo. Son los  expertos los que reciben los mas jugosos emolumentos.  Ahora usted trabaja, es decir, practica su labor ocho horas diarias, seis días a la semana, 50 semanas al año. No se cuantos años lleva usted trabajando pero..... permítame preguntarle: ¿es  usted un experto reconocido en su especialidad? Porque... si no  es así, algo anda mal: No esta usted cumpliendo la parte que le corresponde en la empresa. Esta usted considerando su empleo como un medio para subsistir; no como una oportunidad para progresar. En cuatro años debe usted saber todo lo factible de aprender en cuanto su empleo, su empresa, la especialidad a que esta  de dedica, etc.

¿Sabe usted sobre estas cosas tanto como el medico, el abogado, saben de su profesión?

¿Cuál puede ser la medida para su éxito? Buena actitud mental que le impulso a prepararse y a hacerse tan competente en el  empleo o  especialidad que se haga, mas que necesario, irremplazable. Un ascensorista aprende su especialidad en media hora.  Se encuentran miles para reemplazarlo. Pero un experto en producción, en relaciones humanas, en supervisión, en ventas, en gerencia, necesitan de preparación especial.  Como usted ve, es gestión de objetividad inteligente, No se nos asciende ni por inspirar lastima. Se no da mas porque merecemos mas. Acción, reacción.

Los seres humanos son personas naturales;  las empresas jurídicas. No existen sino en leyes y papeles. Aunque persona natural, el empresario tiene siempre frente a si la máxima de que la debilidad del  ejecutivo es el fracaso de la empresa, la que lo hace obrar mirando siempre a su representada:  La persona jurídica. Y esta solo tiene vida mediante una escritura. Para ella solo figuran cifras:  Tanto me dan, tanto doy.  La empresa no tiene corazón ni sentimientos.... ni podemos culparla por ello, solo da en proporción exacta de lo que recibe.

Claro que se podría decir: Pero, ¿cómo puede estudiar si estoy trabajando? Amigo mío ¡En el siglo XX con las facilidades modernas, prepárese es solo cuestión de proponérselo!.

Ahora hablemos  del 95%  que no triunfa. Si solo un 5% obtiene ventajas, es forzoso pensar que los demás están haciendo algo equivocado. Y no nos engañemos pensando en suerte y circunstancias. Suerte es preparación encontrándose con oportunidad. ¿Circunstancias...? Los hombres somos arquitectos de nuestro destino.

¿Qué esta errado en esa gran mayoría? Dejemos que sea el doctor Albert Schweitzer, medico, ganador de un premio Nóbel por sus contribuciones al bienestar de la  humanidad, quien nos lo diga: “El hombre de hoy no piensa”. Si no queremos pertenecer a ese triste 95% que se conforma, pensemos. Y pensemos ahora; antes de que sea demasiado tarde.

¿Cómo  se manejara su trabajo dentro  de diez años? ¿No podrá usted hacer las innovaciones hoy? ¿Qué adelantos se harán en la industria que explota su  empresa? Los adelantos serán aplicados por hombres y mujeres ¡Entonces..... ¿Por qué no por usted? Recuerde: Una idea, una sola idea..... Le dará fama y fortuna!

Ahora permítame preguntarle: ¿trabaja usted en su empleo con la honestidad intima y la dedicación con que  el profesional lo hace en su profesión? Lo que usted hace para ganar su  vida es su profesión. Dejemos ya de creer que hay ocupaciones mas decentes u honorables que otras: cada ocupación es lo que nosotros hacemos de ella. Un Lord ingles, barriendo las calles, no deja de ser in Lord. Profesional es el que tiene la honestidad y actitud intima de sentirse y actuar como tal!.

Ahora ... También hay un test negativo, usado por muchos empleados. Quiero dárselo también. De usted es la elección: ¿Por qué he de matarme por la compañía? ¿Por qué he de hacer mas trabajo del que me pagan?¿Por qué he de procurar obtener beneficios, si la empresa no es mía? ¿Por  que he de cumplir yo si muchos no cumplen?.

Recuerde a Ali Hafet, al petrolero estadounidense, al contabilista  suramericano y ... finalmente.... permítame hacerle una pregunta: Junto con usted otras 99 personas llegaran un día a los 65 años: Un será rico; cuatro serán económicamente independientes, cinco tendrán que seguir trabajando para vivir; cincuenta y cuatro dependerán de sus familiares o de las instituciones de caridad.

¿ A  QUE GRUPO DESEA PERTENECER USTED?